1 Después de todas estas pruebas de fidelidad, vino Senaquerib, rey de
Asiria, invadió Judá, puso sitio a las ciudades fortificadas y mandó forzar
las murallas.
2 Cuando vio Ezequías que Senaquerib venía con intención de atacar a
Jerusalén,
3 tomó consejo con sus jefes y sus valientes en orden a cegar las
fuentes de agua que había fuera de la ciudad; y ellos le apoyaron.
4 Juntóse mucha gente, y cegaron todas las fuentes y el arroyo que
corría por medio de la región, diciendo: «Cuando vengan los reyes de
Asiria, ¿por qué han de hallar tanta agua?»